Por: Catalina Betancur Uribe
Como mujer siempre fui una crítica total de esas madres que solo se dedican a sus hijos, me parecía increíble desperdiciar tanto tiempo libre con la excusa de estar ocupada con su hijo, más bien las tildaba de perezosas y mantenidas, palabras muy fuertes para aquellas mujeres que en realidad le estaban dando a sus hijos el regalo de crecer con mamá. Hoy en día tengo un hijo de 21 meses, Pablo, el chiquito por el cual toda mi vida cambio, desde el momento que supe que estaba en embarazo, junto con mi esposo tome la decisión de renunciar a mi trabajo cuando Pablo naciera, sí, eso que siempre critique, tome la decisión de ser una perezosa mantenida (según yo), y si, así como yo lo hice con otras mamas, recibí criticas de personas muy cercanas porque iba a desperdiciar mis años de productividad.
Pero cuando Pablo nació en mi vida todo cambio, eso que yo pensaba de esas mujeres que tienen mucho tiempo cuando solo cuidan a sus hijos quedo solo en mi creencia porque realmente me sentía más ocupada y mas cansada que cuando solo tenía que ir a trabajar y ahí si me sobraba tiempo que ahora no, cuando eres mamá el tiempo ya no es tuyo, esa personita depende totalmente de ti, día y noche, que cambio tan grande y tan inesperado recibió mi vida, como cambio mi forma de pensar acerca de esas madres perezosas y mantenidas, comencé a valorar a aquellas mujeres valientes que tomaron la decisión de dejar su vida productiva por quedarse allí con sus chiquitos y que en equipo con su pareja, organizaron su economía para darles la mejor crianza al lado de su madre (ellos se lo merecen), comencé a valorar a esas mujeres que asumieron tantos cambios, de pasar de la reunión, la llamada telefónica, el reconocimiento profesional; a correr como zombi cuando se escucha un llanto, cambiar un pañal o calmar un cólico.
Hoy Pablo ya inicio en la guardería y es momento de retomar proyectos personales, eso sí manejando mi tiempo y hoy felicito a esas madres perezosas y mantenidas por tener el valor de tomar la decisión de darle a sus hijos el mejor regalo, siempre tener el abrazo de mama.
Más Mamás 
Catalina, yo tomé la misma decisión que tu, mis hijos ya estan en el colegio y he empezado a trabajar poco a poco pero en las tardes estoy con ellos, ha sido maravilloso poder disfrutar a mis hijos sabiendo el sacrificio economico y de desarrollo profesional que hice, no me arrepiento ni un instante. Un abrazo, gracias por compartir tu experiencia!
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me parece muy valiente de tu parte aceptar eso.
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Hola. Mi mama se caso a los 19, dice que ella me saco adelante, que yo nunca le he ayudado. Hoy, ni siquiera lava la ropa de mi papa, dice que no le da dinero (todo se acabo porque mantenia a su mama y sus hermanos, y despues a comprar cosas para el monton de cuñados que tambien estaban chicos, desatendiendo a sus hijos para quedar bien), todas las señoras que conozco realizan una actividad economica (no precisamente fuera de casa), mientras que ella dice que las señoras que trabajan andan asi porque se prostituyen. Si ella fue madre fue su decision, y se caso para ya no trabajar, que porque el hombre es el que mantiene, dice que uno debe darle dinero que porque ella se hizo cargo de mi (ella es mi madre biologica), siendo que eso era su obligacion y nunca le dio dinero a su papa o a su madrastra, cuando le di siempre me trato mal y hoy me he quedado sin trabajo por sus chismes
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